Le repite la historia como si fuera la primera vez:
ya no serás la luna y la muerte,
la risa y el alba
los cinco números
con todos sus puntos cardinales,
el sur y el oeste
con sus colores y sus sombras.
Ya no serás.
El día ha comenzado.
No supe ver y mi mano
cae, muerte abajo,
sin distancia.
Miro desde todos los lugares que amo,
inmensos
en los inacabables ojos del mundo.
Solivianto el eco de la noche,
su nudo en la garganta,
quiero huirla, desvencijarla
en el inevitable encuentro:
la muerte con la muerte
vencidas.
Mónica López Bordón
DEJA TU COMENTARIO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Que lindo poema nos entregas..
ResponderEliminarBello comenzar así el año..
Feliz Año Nuevo..
Un abrazo
Saludos fraternos..
Feliz fin de semana...
PD:Que tengas un año 2010 de los mejores.
Gracias Adolfo por pasar siempre y dejar tu mensaje tan esperado.
ResponderEliminarFeliz Año también para tí y que te colme de todos tus deseos.
Saludos y felicidades.
HOla Vilma,
ResponderEliminarMuchas gracias, me alegra compartir tu casa. Es un lujo.
Un fuerte abrazo y feliz 2010.
Mónica López
Mónica: Es un honor para mí tener tus letras en mi Antología Literaria.
ResponderEliminarFelicidades en este año que se inicia.