NOCHES DE LUNA CLARA



Fue una noche de luna clara,
cuando brillaba más que su platinada luz
la serena luz de mi firmamento.
Sus destellos suaves,
cual aleteo insomne de mariposas leves,
emitían fulgores iridiscentes
como los tiernos y azules fuegos
de mi corazón que ardía,
enamorado.

¿Enamorado de quién?
¿De quién más habría de ser?
¿Acaso existe en la oquedad celeste
alguna otra enaltecida estrella
que embelese más
con su sereno brillo
que el tuyo?
¡Jamás!

Fue una noche de luna clara,
lo recuerdo bien.
Tú estabas dentro como sollozando,
temblando casi,
tratando de adivinar en el susurrar del viento
los pasos míos
que se tardaban,
lastimando así tu corazón latente.

Noches de percepción intensa y voluptuosa
fueron aquellas;

pero tan puras, tan vehementes,
como el cándido beso
que apenas roza la piel ingenua
la incendia
en medio de una pasión que abrasa
sosegadamente.

2 comentarios:

  1. BUEN POEMA EXCELENTE ME ALEGRA MUCHO QUE UN COMPATRIOTA ESTE PARTICIPANDO. ESPERO GANE. GUATEMALA Y USTED SE LO MERECE. DIOS LE BENDIGA

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  2. Animooo profe.... bn merecido Dios le bndiga......

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