MI DUEÑO

y mi cuerpo encendías con tus besos
te observaba con miranda embeleso
mientras liabas mi corazón con lazos.

Mi boca reprimió el agotamiento
mientras tu alma reposaba en mi lecho
mis manos te acariciaban el pecho
mientras provocaba el acercamiento.

Evocar los cuerpos entrelazados
los aromas que de ellos exudaba
esa fragancia que se penetraba
por todos nuestros poros succionados.

No dejes que despierte de este sueño
regalame esa noche deseada
con estrellas y luna acompañada
tu mi preciado amor, también mi dueño.



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1 comentario:

  1. Me encanto este poema, es romántico, intenso, apasaionado...Tiene una sonoridad que lo hace muy bello.

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