Todas las noches leo a Virginia Woolf

Todas las noches leo a Virginia Woolf,
cada línea es como mis venas cortadas.
Siendo las piedras en el bolsillo de mi pijama.
Los pasos me conducen hacia el mar
entonces me quedo casi dormida.
-¡Apaga la luz, duérmete, que mañana todo cambiará!
Pero sus palabras se pierden por la casa.
Dejo mi rostro pegado al cristal
a ver si se me congela
pero yo insisto leo su Diario.
Te escribo esta carta que ya nunca leerás porque
no estás conmigo.
Sólo esa sugerente visión del viento
las noches llenas de tempestad
ahuyentan tu fría presencia.
Alguien me mira desde el pasillo
me da la mano suave cálida
floto en el vacío como si levitara.
Todas las noches me caigo
por la ventana de los sueños
y vuelo por los tejados hasta el precipicio de largos besos.

Amparo Peris
(Fragmento de "Las Gatas de Rodas aúllan a la Luna")


DEJA TU COMENTARIO

No hay comentarios:

Publicar un comentario