No pretendas retener los momentos felices
Se escapan entre los dedos
Como el agua se escurre, se evapora
Como el calor de los besos
Con la dulzura de las caricias
Se evapora la risa, la luz
Luz que se extingue al atardecer
Como la pasión tras el encuentro
No quieras retener la felicidad
Porque es atar la luz
Retener el agua, detener el tiempo
Disfruta el momento, el ahora, el aquí
Y devuelve el agua a su cauce
La luz a la mañana
La oscuridad a la noche
Los sueños al olvido
El precio de un bello sueño
Es despertar a la realidad
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Precioso es leerte siempre..
ResponderEliminarSaludos fraternos con cariño
un abrazo muy fuerte
besos
Gracia por compartir tu espacio..
A veces la realidad no es como mi sueño y prefiero seguir durmiendo...
ResponderEliminarun beso
Precioso blog. Me alegra haberte conocido.
ResponderEliminarEl poema de tu entrada es hermoso, y con un contenido muy realista.
Un abrazo.
tu poema es preciso muy realista, menos mal que el tiempo es algo abstracto la felicidad aunque dure un segundo es como si durara todo un siglo
ResponderEliminarHola amiga mía, hacía tiempo que no me deleitaba leyendo alguna de tus obras. Veo que tu estilo sigue fiel, palabras grabadas a fuego sobre la piel de la vida, felicidad que escapa a borbotones como el líquido bermejo de las arterias abiertas ...
ResponderEliminarTe felicita y saluda este viejo amigo, Chopovsky.