Siempre podré escribirte
en la luz profunda
del vértigo nocturno.
Esclava de estrellas lejanas
refugiada en un cántaro profundo,
sobre la tierra jadeante,
y en una efímera colina
se estremecerá el alba.
En su velo de llamas
una hoguera melancólica
nos cubrirá.
Si algo quieres decirme
tu mirada me bastará,
para cubrir la guarida
de mi alma.
Y hospedados en la niebla
veremos a Dios
pintando paisajes
y un ángel prodigioso
componiendo conciertos
en la catedral del cielo.
Poeta, tus metáforas tiene la música especial que emanan todo lo que escribes.
ResponderEliminarun abrazo
María Rosa
Querida poeta: los ángeles prodigiosos guiaran tus palabras hasta lo alto del cielo.
ResponderEliminarUn cariño de Norma Padra
Querida Stella: tus paladras poéticas guiará a los ángeles hacia lo alto del cielo.
ResponderEliminarUn abrazo de Norma Padra