SAMSARA

Si aquél tiempo
de belleza, de algarabía
de sentimientos genuinos
pudiera retroceder
al menos un poco
para nutrir las células
perdidas del amor.

Si al menos pudiera
descender la lluvia
en los corazones rotos
de aquéllos seres a quienes
un día amamos tanto.

Si pudiera la encantada melodía
revertir en dulzura
los campos sembrados de ingratitud,
odio y desamor.

Si tan sólo un rayo de luz
atravesara las tinieblas del
corazòn enlutado.

Qué no daría por retroceder
la rueda del tiempo
de mis historias pasadas,
mudas hoy, que retrotraen
hechizos espasmódicos
encubiertos de finas dagas.

O absorver los néctares siempre vivos
del amor que sobre mi pecho
adviene en marejadas turbulentas
amenazando resquebrajar los portones
de mi debilitada ciudadela.

Si al menos la distancia entre el amor
y el olvido viniera a menos
podría quizá el amor
abrevar nuevamente sobre mi lecho.

Jaime Botello Valle


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